Radiografía cerebral

Haciendo click en la imagen del escáner este cerebral tope de fashion que yo creo que, te metes ahí y te teletransportas seguro, pues que el click lleva a un artículo que me pareció interesante y quiero compartir, algo que ya va siendo bastante habitual, el hecho de que leo el periódico, y ya voy teniendo favoritos, como la opción esa del ordenador, "favoritos", y te guardas las webs que sueles visitar, así no tienes que andar escribiéndolo cada vez. Vamos, supongo que este blog está en "favoritos" de muchos ordenadores del mundo, digo yo, jejeje. Pues lo mismo me ocurre con la costumbre café más periódico, que me encuentro con varios columnistas de los que me hago eco, como Vicente Magro Servet, que algún artículo suyo ya he enlazado aquí, y ahora lo vuelvo a hacer con un texto por título "Los cajones del cerebro", sobre tema interesante del comportamiento... humano. Me sugirió un escáner cerebral, y, oye, a mí me han hecho un escáner, pero no del cerebro, todo llegará. El escáner me lo hicieron porque estoy mu mal de la espalda, en concreto, de las cervicales, lo que tengo se llama cervicalgia, vaya por dios. Pero yo creo que por ahí se empieza: primero se te duermen las manos y los brazos, y luego te hacen un escáner, y acaba afectándote, no sé si al cerebro, pero a la mente y a tu vida diaria sí, porque, vamos, estoy todo el día buscando a ver quién me da un masaje, que siempre tengo que acabar dándolos yo, con eso de que, uno de los millones de cursos que he realizado, por supuesto, fue el quiromasaje psicoterápéutico, es decir, que masaje hay hasta de orejas. Pero el artículo de nuestro articulista, no va de cervicales, va de algo más inexplicable. Empieza diciendo que no es un artículo científico, creo que está bien que lo mencione, para que nadie le diga que primero se informe, el pobre, con lo bien que escribe, y las cosas tan interesantes que dice, como para decirle que no sabe lo que dice, cuando todos sabemos lo que decimos, incluso cuando no sabemos, creemos que sabemos, que yo diría dejemos decir a quien sabe, quién sabe, si resulta que, de todos podemos aprender algo. Por ejemplo, yo, voy comprobando de mí, que cada vez sé menos, pero no me gustará que venga alguien y que me diga que no sé, anda ya! ya van dos si me dicen: es que hablas como formulando sentencias, y es que hablas como sentando cátedra. Ya, supongo que tener las cosas claras, y tener personalidad, es lo mismo que caer mal, es lo mismo que venga alguien y piense que no se puede discutir contigo porque como una habla así tan contundentemente, pues, que, si te dicen que no se puede discutir contigo, en realidad lo que te están diciendo es que tú no sabes nada y quien sabe es el otro, y que ve que no podría discutir contigo para acabar convenciéndote de que la razón la tiene el otro. Entonces, qué listo el otro que te acusa de no poder discutir contigo, lo que quiere es llevarte a su terreno, y entonces te dice que eres tú el que pretendes eso. Para acabar diciendo que todo, sólo es una opinión. Al final, un texto en un periódico, es unilateral, y si quieres lo lees, y si quieres rajas de quien lo escribió, por mucho que sepa escribir, son cosas distintas. Pero comenzar escribiendo diciendo que las líneas no son científicas, es lo mismo que decir que todos tenemos nuestras reflexiones, pensamientos, teorías, opiniones, e inquietudes, unos más que otros. A mí la lástima me sobreviene cuando es alguien que estudió una ciencia, y resulta que lo que dice tampoco es científico. Tú dile al matemático que uno más uno no son dos, que eso no es ciencia, que eso es su opinión, porque se puede opinar que uno más uno son tres. Pues nada. Entonces, mejor no estudiar, y reconocer que nada es ciencia, que sólo son nuestras impresiones, y que sólo la verdad tiene que ver con la inteligencia. Si quien escribe el artículo no pretendía ser científico, lo que ha conseguido es despertar mi interés, por inteligente. En mi opinión, claro está, es una acertada reflexión sobre la defensa, el ataque, la violencia, y lo más científico es decir que el cerebro es todo un enigma. Ni con escáner ;-)