Crímenes Imperfectos

  Pasé de estar enganchada a la hora de la siesta a los documentales de animalicos, teniendo en cuenta que, cuando estás en el paro, la siesta te la puedes tomar después del documental, es decir, que ver a los castores, a los pingüinos y a los océanos a las cuatro de la tarde, está claro que depende del curro que se tenga, o no se tenga! resulta que me puse a dormir en esas horas intempestivas de la tarde, para estar sospechosamente despierta de madrugada y sintonizar el Xplora. Y tras cuatro semanas que llevo así, el destino quiso retirar este canal de la caja televisiva! Me pensé un par de veces antes si reivindicar esto, también, je, si suspender una licencia en la televisión que nunca existió, en todo caso, como INDIGNADA, puedo arremeter contra la ilegalidad del gobierno de turno, al fin y al cabo, sigo siendo anarquista, no hay ni quien me fiche! Me convertí en espectadora de la noche al entonces engancharme a los documentales sobre crímenes. El programa es Crímenes Imperfectos. No he hecho más que, esperar a que se echara el día, para que llegara la noche: Y ver, historias concatenadas de aquello que, a cualquier estudiante de Psicología, por supuesto nos encantaba y nos llamaba la atención. En este sentido, cuando dije en mi casa que la especialidad que quería estudiar era Sexología, en seguida pensaron que era algo precioso con mucho por hacer, lo cual mea culpa que no supe transmitir cuando se supone que se me contrató para ello. Si hubiera dicho en mi familia que, tras la carrera de Psicología, va y el interés hubiera sido la Criminología, creeros que, la respuesta no hubiera sido igual a la que recibí con la Sexología. Me refiero a que, en cuestión de estudios sobre sexo, no hubo nada como para sorprenderse. Si el leitmotiv hubiera sido lo que actualmente ha supuesto mi personal leitmotiv por el que he permanecido despierta para ver esos “Crímenes Imperfectos”, me imagino que, el objeto de estudio del que estamos hablando, es la misma inquietud que tengo yo al compartir en Internet esta relación morbosa sobre la muerte, la ciencia forense y la psicología en torno a los homicidios y a los asesinatos. En este sentido, alguna vez llegué a escribir por las redes sociales que, no me importaría una muerte diseñada a partir de una mente que considerara que me encontraría entre su destino para quizás hacerme el favor de yo hacerle el favor a alguien que necesita ayuda. Lo peor que nos podría pasar es, encontrarnos con nuestra alma gemela que nos va a quitar la vida, por luego no poder escribirlo en el blog.